jueves, 26 de septiembre de 2013

El encuentro .

Era una noche calurosa de verano cuando lo conocí .
La verdad que ya nos habíamos escrito dos meses enseguida , mails diarias como piezas de un puzzle recomponían nuestro pasado, nuestro carácter , nuestras manera de ver la vida descubriendo como se encajaban algunas perfectamente, otras … habían que limarlas .
Faltaba solo la pieza final …el encuentro .
Cómplices la noche cálida, unas cuantas cervezas y una buena conversación llegamos hacia el portal de mi casa, con el corazón palpitante por el deseo de un beso que no tardó en llegar.
El ascensor subía lento, demasiado lento indiferente a nuestro creciente deseo.
Entramos en casa, lo invité a una copa, para darme el tiempo de disfrutar esté mágico momento de cortejo.
Me gusta que me desnuden lentamente, sin prisa, con calma, preludio cruel de una tempestad de sensaciones.
Quiso darme un masaje relajante, me quité la camiseta , desabrochó mi sujetador para que sus manos se movieran sin obstáculos en mis hombros, de arriba a abajo… lentamente, en mi espalda ,de arriba a abajo… sensualmente, de arriba a abajo, rozando suavemente mi costado con las yemas de sus dedos , produciéndome placenteras descargas eléctricas. Levante un poco el busto para que sus manos deslizaran hacia mis pechos que agarró con fuerza dejándome mareada por la emoción. Me di la vuelta necesitaba su lengua en mi boca. Le quité la camiseta necesitaba tocarlo, su cara, su pelo, su cuello, sus hombros, luego su pecho varonil, la punta de mi lengua acompañaba mis manos en una danza erótica sin fin. Lamí sus pezones bajando lentamente hacia el ombligo en círculos voluptuoso, le mordisquee el vientre provocándole un escalofrío al pensamiento de lo que iba a pasar…

BIP BIP BIP….

Son las 9 de la mañana, esta noche tengo el encuentro …

                                                                               La Bambola 

lunes, 23 de septiembre de 2013

SER MARICÓN..... ESTÁ DE MODA!?!?

Yo aún recuerdo cuando ser maricón estaba prohibido en este país, y ahora..... ahora estamos más de moda que la tortilla de patatas en este país, que es de toda la vida! Todo el mundo quiere un maricón en su familia, en su grupo de amigos o entre sus compañeros de trabajo: da solera, da prestigio, da.... la risa!!!

En realidad no sé cuán de moda podremos estar cuando: las mujeres (heteros) nos odian porque les quitamos a “los mejores” chicos; los hombres (heteros) nos odian porque follamos más que ellos, en cantidad, calidad y facilidad; las lesbianas nos odian....porque odian a todo el mundo y punto! e incluso entre los propios maricones la maldad abunda (¿nunca han oído hablar de las “maricas malas”?!?!? pues no es un mito, existen de verdad!!!!)

Aún así.... estamos de moda! porque somos altos, somos guapos, somos divertidos, somos ricasyfamosas..... ESO SÍ QUE ES UN MITO!!! también hay maricones bajos, feos, aburridos y pobres, pero claro! esos maricones son anónimos y nadie los conoce como maricones, se les conoce como “el bajo de la oficina”, “el feo del pueblo”, “el aburrido del grupo” o “el pobre” (y ni siquiera “el pobre maricón”,no! “el pobre” y punto!)

Así y todo.... todo el mundo quiere un maricón en la familia. Qué árbol genealógico que se precie hoy en día no tiene una rama rosa!?!? y si por un casual no lo hay (o no se sabe), se inventa! y el pobre tío solterón (solterón porque era bajo, o feo, o aburrido, o pobre o incluso todo eso a la vez) pasa a ser “la oveja rosa” oficial de la familia! si ej que....... ya no hay respeto por nada!!!

Qué grupo de amigos no cuenta ahora con un mariquita entre ellos!?!? y si no lo hay, se busca uno, se adoptan dos o se compran tres! será por maricones! Si es que ahora somos una plaga, coño! Antes no había manera de salir del armario, pero es que ahora...... todos parecen maricones: los mariquitas parecen maricones (bien!), pero es que los heteros también parecen maricones (mal!); hasta los perros (pobrecitos) parecen mariquitas, con esos estúpidos lacitos rosas en la cabeza (mal!). Yo creo que hasta las lesbianas parecen maricones sobrevenidos!!! (mal, mal, mal!)

Incluso las madres, que antes los protegían (madres protectoras), ahora los anuncian a bombo y platillo como un trofeo cualquiera:

       FULANITA.- Y cómo están tus niños, Mengana!?!?

      MENGANITA.- Ah! qué te voy a contar, Fulana! El mayor se ha separado, qué decepción! es como su padre! pero el pequeño se me ha hecho “GAY”, y estoy encantada: me limpia, me lava, me friega, me cocina..... si hasta viene conmiga a comprar trapitos!!! Ese sí que ha salido a mi!!!

Hombre, un poco de “normalidad” no viene mal, pero eso de ser el centro de atención, así de repente..... da al traste con todo el morbo de antes de ser “normales”. Aún recuerdo con nostalgia esa extraña sensación en el estómago cuando te acercabas a la puerta de un local de maricones, mirando a un lado y a otro para que nadie te viera entrar, y una vez dentro..... BUM! la debacle! Pero.... ahora!??? Ahora entras en un local de maricones y te encuentras con tu panadera, con tu vecina, con tu prima la de Cuenca y  HASTA CON TU MADRE!!!:

       MADRE.- CARIÑOOOOO! VEN! QUE QUIERO QUE CONOZCAS A UNA AMIGAS MIAS! -Te dice con una sonrisa de oreja a oreja introduciéndote en su grupo, mientras te susurra al oído: Podías haberte puesto hoy la camisina que te regalé, coño! tú que siempre vas hecho un pincel, vas hoy y te vistes con andrajos.

       Y es que uno ya no puede con tanta presión social, coño! Mira que yo nunca quise “curarme” y ser hetero, pero ahora..... ahora me lo estoy pensando!


Fdo:
      GAY GUY (EL MARICÓN DEL PUEBLO)

jueves, 19 de septiembre de 2013

Sapo segundo .

 
¿Alguna vez te has planteado que a tus vein…trein…cuar… y tantos años, falta “algo” en tu vida?.
“Algo” que te “invita” a sentarte en la mesa de los niños en las bodas de tus amigas; “algo” que en un restaurante resulta incómodo cuando te preguntan ¿mesa para uno? mientras giras a ver si hay “algo” más que no hayas visto porque lo obvio es obvio.       
Pues yo estaba así, en un sitio en el que lo único que había alrededor era agua y platanares. Carente de mi “algo” intentaba encontrar un sitio con el famoso wifi que me mantuviera en contacto con el mundo continental.  
El “único” sitio donde podías hacer esto era en el ”único” bar que sin ser un oasis en medio del desierto, bien podría describirse como tal. 
En lugar de tapa podías enviar un mail, revisar el feiss o enterarte de las noticias. En todo este animado mundo sólo podías toparte con cuatro personajes: el dueño del bar, su esposa, (ambos alemanes de piel avejentada y enrojecida por tanto sol), un jubilado que le hablaba en alemán a su perro que también parecía jubilado porque caminaba casi reptando y yo. Sí, yo. Que sin hablar alemán, sin ser jubilada y sin tener perro me faltaba “algo”. 
Mientras intentaba mantener un hilo cibernético con mi vida social, el dueño del bar me acercó una caña con la seguida frase de película “la invita el caballero”. Mi cabeza temía que fuera el hombre del perro, porque yo podría parecer su nieta, y asomé la mirada de entre el portátil temerosa para descubrir ¡oh, sorpresa! A un lozano joven moreno y sonriente que levantaba su bebida para brindar conmigo. 
Yo aún desconfiada agradecí la caña y seguí mi labor. Una caña se convirtió en dos. Dos en tres, tres en cuatro, y así hasta ocho y muchas risas. Complicidad, número de teléfono y la jugosa promesa de ser mi guía turístico en aquel sitio me hicieron sucumbir a “algo”. 
“Algo” que sentí en mi interior, como mariposeo de quinceañera cuando te gusta algún chico. 
Ya con este “algo” el sitio rodeado de agua y platanares, comenzaba a tener un “algo” especial. 
“Algo” estaba cambiando. Ya  no me preocupaba tanto por mantener al día mi vida “on line”. 
El guía turístico resultó ser perfecto: restaurantes con”¿mesa para dos?” , discotecas, playas, poblados, paseos de ensueño.
Pero en todo paraíso también hay tormenta y este no fue la excepción. 
Me trasladaban del trabajo a otro sitio y mi guía turístico no estaba en la ciudad. Me parecía poco cortés y cercano darle la noticia por teléfono o por mensaje, así que preferí ir a ver a su hermana (que trabajaba en el mismo sitio que yo) y dejarle una carta “algo” romántica, que permitiera que la guía turística y no turística que planeábamos “editar”, continuara. Cuando coincidí con su hermana, le di la noticia de mi traslado y le pedí que le entregara la carta a su hermano. 
En ese momento ella agregó la palma de oro de este relato: “Claro, es que está tan ocupado con la boda”. 
Yo puse cara de “algo” seguramente porque la siguiente intervención de esta chica fue :
“No te había dicho nada ¿verdad?” 
Intenté resolver rápidamente: ¡Claro! “Algo” me había contado. Bueno, debo irme.
Tomé el vuelo sin remordimiento, con cara de “sí viajo sola y ¿qué?” con lo que evité que me hicieran la pregunta.
Si “algo” se aprende de ésta anécdota, es que cuando sientas que “algo” falta, amiga mía, mejor que falte y no que sobre. Porque definitivamente yo prefiero mesa para dos, y no mesa para tres.
¡Siguiente!
                                                   Merlina Brujas

lunes, 16 de septiembre de 2013

3 por lo menos



Este verano , después de muchas reuniones alcohólicas entre amigas, hemos redactado la regla de los “3 por lo menos”.
La regla consiste en no salir con un solo chico al que dedicaríamos todo nuestro tiempo , nuestra ilusión, esperanzas , tendríamos que dedicarnos a tres a la vez…por lo menos .
Esto nos alejaría de inútiles  decepciones, porque si no te contacta uno, no recibes el mensaje del otro, seguro que el tercero haría la una o la otra cosa o a lo mejor… las dos a la vez!
Así fue! Fuimos a las fiestas de la Paloma en la Latina a lucir nuestra piel morena, nuestros vestidos de “ataque”, con las mejores sonrisas y las peores intenciones . Queréis guerra señores? Aquí la tenéis!
GRAN ÉXITO!
Los hombres se acercaban como abejas a la miel .
Gracias a unos minis de cerveza fría que subían rápido a la cabeza por culpa del calor, nos soltamos en bailes propiciatorios .
La verdad que no me acuerdo de mucho… sé sólo que al día siguiente tenia “3 por lo menos” que querían quedar conmigo!
Misión cumplida!
Suerte que en el whatsapp aparecen las fotitos de la gente que te escribe …porque hubiera tardado mucho más en recomponer en mis débiles recuerdos, los diferentes encuentros!
Sé que os estaréis alegrando por mí! La Italiana por fin…La Italiana qué guay …La Italiana va a ser mi ejemplo…
Parad parad! Porque….la cagué!
Sí!
Tenía a “3 por lo menos” chicos que iban a por mí , y qué hice yo? Aposté por uno!
Lo sé , lo sé , soy la peor! Mucho hablar y miradla monógama hasta los huesos, qué antigüedad!
Qué puedo decir para justificarme? Pues…me encantaba!
Guapete, interesante, inquieto , inteligente, deportista, simpático y encima… estaba interesado en mí, se lo estaba currando muy bien …por qué tenía que salir con alguien más? Jooo hace tiempo que no me ilusionaba tanto, por qué tenía que desperdiciar mi tiempo, mi energía, mi pasión con alguien que no fuera él?
Porque , porque, porque …la cagué!
Es que yo tengo mucho tiempo, mucha energía, demasiada pasión pues…a 1 mensaje suyo, 2 míos – a 3 suyos 5 míos  - 8/13/21 pues habéis entendido, una sucesión numérica Fibonacci en toda regla! Hasta llegar al principio de la sucesión : “0”!
Ya, así fue, el hombre que había elegido entre “3 por lo menos ”, desapareció, sin más, sin un porqué , una explicación , ni una excusa de mentira. Yo que me pensaba haber encontrado una persona especial, me di cuenta que lo había hecho yo tan especial por elegirlo entre “3 por lo menos ” .
Y como se dice, de los errores se aprende y si soy una débil mujercita monógama y no puedo seguir la regla a la perfección, os prometo que no me obsesionaré más por el objeto de mi deseo. En lugar de cada mensaje que me gustaría enviar me comeré una golosina, engordaré… pero El será MIO!
                                                      
                                                            La Italiana

jueves, 12 de septiembre de 2013

Cuánto daño ha hecho Walt Disney. (O lo que es lo mismo ¿Cuántos sapos hay que besar para dar con el dichoso príncipe azul?)

https://mail-attachment.googleusercontent.com/attachment/?ui=2&ik=441679df0e&view=att&th=1410cb4b78ba2207&attid=0.2&disp=inline&safe=1&zw&saduie=AG9B_P-vY_fxBs4Y9xFiwkjbDtbu&sadet=1378900736504&sads=gxmpLDl2TW859urKJBf562ELblA
Desde niña fui bombardeada con libros de cuentos según para fomentar mi gusto por la lectura, y, efectivamente, ocurrió. Pero también ocurrió que se grabaron en mis archivos neuronales, la búsqueda constante del príncipe que llegaría en su corcel, que además de ser guapo e inteligente, tendría buen gusto, pues me elegiría a mi como dueña de su reino (IKEA). Lo que esos cuentos no detallan, es qué pasaba en realidad por la cabeza de las hermanastras, que también siendo princesas muchas de ellas, se quedaban solas y sin cuento. Imagino que si tú eres princesa Disney, hermanastra, bruja, madrastra o hada, éstas historias te llegarán a la fibra mágica, y quizá reconocerás algún sapo que se ha atravesado por tu cuento.  Bueno, pues a reír y a comprobar que cualquier parecido con tu cuento, ¡NO! ¡No es pura casualidad!.




Sapo Primero.

Lo conocí porque era portero. No de fútbol sino de un garito que además de ser mi favorito, estaba frente a mi casa. Una noche, nos lo presentó el dueño del bar, entre alegorías de chupitos embellecedores y sin omitir, por supuesto, los dos besos de protocolo. Primer contacto: olía tan bien y sonrío de una manera tan especial, que sí,sentí el pinchazo de la Bella durmiente y el hechizo comenzó.

No terminó la noche y se acercó directamente para invitarme una copa en otro sitio cuando saliera de currar. Yo miré a mi amiga buscando complicidad para ir juntas, pero mi amiga viendo el panorama hizo un Houdini y desapareció para propiciar la "cita exprés”. Efectivamente: baile, copa, besos, manos traviesas y número de teléfono.
El primer argumento del sapo fue un “yo no busco relaciones serias”, argumento que a mi en su momento me hizo estrecharle la mano como quien cierra un trato. 
Yo,qué quieren que les diga, después de ser como Blanca Nieves, siempre rodeada de tíos que nunca daban la talla, pues por fin creía encontrar algo que me llenaba más, y con el estilo de vida que llevaba estaba bien. Trabajaba todos los días excepto los lunes, tenía más de dos trabajos, y el tiempo no era lo que más me sobraba. Era un buen chollo.
Quedabas con alguien que te gustaba, intercambiabas placer y cada quien a su casa. Gran ganga diría McNamara.Todos los fines de semana y los lunes se convirtieron en mis días favoritos. Llamadas de teléfono y mensajitos (porque ahí no existía aún el “guasa”) hicieron que en mi cabeza y en mi corazón por más que yo me la pasara como Cenicienta, limpie y limpie, es decir, borrando lo que estaba empezando a germinar, pasara lo obvio: empecé a sentir algo más por él. Aquí cabe mencionar que cambió de trabajo el sapito en cuestión y llegaba en su corcel a recogerme al trabajo. 
¡Qué mejor recompensa que ver a tu objeto de deseo esperándote a la salida del trabajo! Aunque el corcel fuera de un color chillón, música chumba chumba y sólo le faltara rebuznar, que diga, relinchar. 
Mi cabeza y mi corazón discutían mucho porque  me negaba a reconocer lo que ya era inevitable: me había enamorado, pero me sentí tonta por el argumento aquel de “yo no busco relaciones serias”. A mi me quedaba muy claro que después de dos años con esta dinámica, los lazos se habían estrechado y la relación evolucionado. Cuando intenté plantear la situación para obtener título nobiliario de reina y “noviliario” de novia, primero por teléfono obtuve un “si lo que tú necesitas yo te lo puedo dar, yo te lo daré”, y en persona fue un mareo y un paseo por la dialéctica que me hizo entender que esto no avanzaba para ningún lado. Con dolor y sin ver cambios, le dije que no me llamara más.Que debíamos alejarnos. Que debíamos continuar nuestras vidas (cada quien su cuento).
Encontré un trabajo fuera de la ciudad y lo acepté. 
Por cuestiones de estas que sólo ocurren en un cuento donde se busca un príncipe, volví a coincidir con el sapo seis meses después, quedando e intentando frenar mis sentimientos hacia él. Él por su parte, yo notaba que se intentaba acercar y yo sólo intentaba pensar en el invierno o en el iceberg más grande de la Antártida. 
Pero los cuentos son así, se descubre la verdad, y eso pasó. 
No pude ocultarla más y le dije que lo había extrañado mucho, que lo había pasado muy mal sin él y las lágrimas no faltaron. No, no sólo mis lágrimas. También las suyas. Porque los sapos también lloran. Cuando me dijo que él también lo había pasado mal y que si no me había buscado era porque yo se lo había pedido, sí, sí, sentí que el maleficio de la bruja se rompía y el sapo se volvía príncipe. (Un momento, que aún hay más cuento. Dicen que los animales más obedientes son los cerdos, luego los delfines, y luego los perros. Yo pondría en primer lugar a los sapos, al menos ya comprobamos que si les dices “no me llames” no te llaman. “No me busques” No te buscan. “Fóllame” te follan. “Bésame” te besan. No sé por qué no se me ocurrió decir “cómprame ese piso”.Esto sólo como nota informativa.)
Ya en el portal de mi casa, el silencio fue nuestro código, y yo embelesada por lo bello de mi sapo que empezaba a tener atributos de príncipe (otra nota informativa: al contrario de lo que todos creen, hay príncipes que no usan Pantene, porque efectivamente, ¡son calvos!, y ahí, ahí mismo, estriba el encanto) dijo las palabras mágicas: “TE AMO”. Yo sentí que había triunfado como los Chicos. (Que nunca pusieron una banda sonora a Disney pero hubiera quedado muy bien.)
Yo tenía que volver a irme de la ciudad por seis meses más pero él prometió ir a verme. Al menos llamadas y mensajitos no me faltaron. Cuando consiguió el permiso en su trabajo para tener cuatro días e ir a verme no pudo sino ya romper el hechizo.
El mismo día del arribo, yo preparando: vestidito resultón, botellita de vino especial que tuve que ir a conseguir a una vinoteca a 10 kms.  de donde vivía, sábanas nuevas, limpieza de la casa, que diga palacio, extrema, y todo para recibir la palma de plata: “Quiero que tengas presente que el que va a verte es tu amigo, porque yo no quiero nada serio”. Agregó que se había enamorado de una tía de su nuevo trabajo y que realmente le gustaba. Yo me deslavé y mi sonrisa se destiñó. Acababa de besarlo y de príncipe top manta, pirata y calvo, se convirtió de nuevo en sapo. Se alejó dando saltos en su corcel tuneado y escuchando su música  de subidón. 
Después de todo, nuestros cuentos nunca podrían coincidir, yo soy la princesa del cuento de ayer (¡Ay! Antonio Vegas) y él era sapo de cuentos bacalas. 
Hay combinaciones que no son buenas aleaciones. 
Pero yo me quedo con los sentimientos que este sapo logró en mi. Me descubrí más princesa que nunca o mejor dicho, más reina que nunca. Y reina de corazones: “Que le corten la cabeza”. 
Sólo recordé a Lorena Bobbit y la justicia que hizo con su marido.
¡Siguiente!

                                          Merlina Brujas

lunes, 9 de septiembre de 2013

Las cosas que tenemos en común


Las cosas que tenemos en común son 4.850
Las cuentos desde siempre, desde que me dijiste
"Pero vamos, así que también tu eres de  los años 60?!”
Tenemos dos brazos, dos manos, dos piernas, dos pies,
dos orejas y solamente un cerebro
sólo la mirada no es igual porque la mía es normal, la tuya es súper bonita.
Las cosas que tenemos en común son facilísimas de encontrar
nos gusta la música a todo volumen hasta que el equipo la pueda aguantar.

Nos gusta Daniele, Battisti, Lorenzo ,los gritos de Prince, The Police
Nos ponemos un CD antes de dormir y a nuestro despertar sigue allí.

Porque cuando yo duermo ... tu duermes
cuando yo hablo ... tu hablas
cuando me río ... tu ríes
Cuando yo lloro ... tu lloras
cuando yo duermo ... tu duermes
cuando yo hablo ... tu hablas
Cuando me río cuando ... tu ríes
cuando yo lloro ... tu ríes .

Las cosas que tenemos en común son tantas que casi asusta, los dos vivimos hace más de vente años y menos de treinta, nos gusta comer, dormir, viajar, bailar, sonreír y hacer el amor, lo ves, son tantas las cosas que tenemos en común que para hacer un lista se necesitarían por lo menos tres horas .

Por lo tanto 
Qué  necesitas más? Para mi ha sido suficiente una hora …

Las cosas que tenemos en común, recuerdas fuiste tu en decirlo “Mira el mismo local, las mismas patatas, el mismo vino!” A cada pregunta una nueva confirmación, un idéntico ritmo de vino y risas, y después la emoción de aquel primer beso, dos labios precisos, perfectos, pegados.
Abrazarte, estudiar tu cuerpo y ver que tu cara era toda roja y descubrir asombrado y emocionado que tenias mis mismos huesos.
Entonces te pregunto : no es suficiente? Que necesitas más con todas las cosas que tenemos en común, no crees que una unión entre nosotros seria perfecta?

Las cosas que tenemos en común son 4.850
Las cuentos desde siempre, desde que me dijiste
"Pero vamos, así que también tu eres de  los años 60?!”
Tenemos dos brazos, dos manos, dos piernas, dos pies,
dos orejas y solamente un cerebro,
sólo la mirada no es igual porque la mía es normal, la tuya es súper bonita...


                                                    Daniele Silvestri


 

jueves, 5 de septiembre de 2013

muchosexinmallorca



Verano 2013.Palma de Mallorca

Por fin de vacaciones! Los que trabajamos parece que vivimos para los fines de semana y las benditas vacaciones.
En tu maleta súper chiquitita siempre hay espacio para un bikini, una toalla, mucha ilusión y expectativas, las mías… muchísimas, tantas que casi no paso el controlo Rynair!

Os cuento todo lo que ha pasado :

.................................................................................................................
.................................................................................................................. pues nada!

Os cuento lo que no me ha pasado:
Por el día temperaturas agradables, sol, mar y mar , playas completamente desoladas todas para mi, increíble para ser agosto , ningún pie en mi boca por falta de espacio.
Ningún niño que grita o tíos blacuchos que juegan a las palas arriesgando a cada golpe de partirme la cara.
Mar limpio, incontaminado como si ningún barco hubiera descargado su basura en la costa o como si este año los ecologistas no hubieran decidido que hay que dejar las algas por salvaguardar el ecosistema.
Y hablamos de las noches. Increíbles!
Íbamos a los restaurantes mas lujosos de toda Palma , sin mirar los precios ni nada , porque curramos pocas horas diarias ganando un montón de dinero.
“Champagne camarero e invite la mesa de a lado por favor”.
Si porque todos en Palma son guapísimos, riquísimos, solteros y hombres de verdad! Nada de niñatos chonis que se quedan todo el año encerrados en un gym para enseñar el resultado de sus esfuerzos en 1 semana de vacaciones.
Tu los invitas a una copa de champán y ellos te invitan a un party en su yate privado.
Así es de sencillo en Palma.
Cuatro hombres por cada mujer, me gustan estas fiestas.
Buena comida, buen vino, buena música…buena compañía.
Si! Cada noche una compañía diferente, tamaños diferentes! pasaban de ser grandes, grandísimos a enormes! Todos fantásticos amantes , muchos preliminares para mi antes de llegar a uno , dos , tres orgamos …AAAAAAAAAAAAAhora he vuelto a Madrid, estoy en mi trabajo de mileurista y sigo soñando sobre lo que NO ME HA PASADO en mis vacaciones …
                                                                         La Italiana





lunes, 2 de septiembre de 2013

De vuelta a (pocosexin) Madrid !

Argrrrr perdonarnos!
La redacción de pocosexinmadrid se ha ido de vacaciones…sin más!
Seguro os estabais preguntando el por qué de este coiptus interuptus literario.
Nuevos novios? Nuevos rollos? Que ha pasado? Que ha pasado?
Pues teníamos que recoger material para pasar el otoño con cuentos novedosos, calurosos, picantes, picaros… alargamos un poco el verano no?!!!


Y vosotros que?
Pocosexinmadrid está abierto a todos los que tengan gana de compartir sus vivencias, algo más que abierto… estaría encantado!

Acuérdate del espíritu de este blog … lo que ayer te hizo llorar, reír, pensar que te pasa sólo a ti , que estas loco, hoy posiblemente puedas ironizarlo,  tomártelo a la ligera y podrías echarle un cable a alguien que lo está viviendo… y ni te cuento del desahogo que seria para ti!
Escribe a: pocosexinmadrid@gmail.com

Que más decir…. que el juego empiece porque hay… pocosexinmadrid…y algo tiene que cambiar!