Erase una vez,
en un reino muy lejano, vivía una niña que soñaba con su príncipe azul, pasaban
los años y nada ni nadie la hacía desistir en su espera. Su príncipe llegaría
un día de primavera galopando en su caballo blanco.
La adolescencia
pasó en un chasquido de dedos y una juventud extraordinaria ocupó su lugar, por
aquel entonces ya no sentía si su príncipe llegaría en un día de primavera o de
otoño con una lluvia torrencial y el caballo ya no era tan blanco más bien
negro, pero el príncipe, su príncipe aparecería tarde o temprano… en la espera
conoció algún que otro varón que la pretendió y la pidió en matrimonio, pero el
eco de las palabras “hasta que la muerte os separe”…..retumbaban en su interior
y una voz siempre le repetía….no tengas prisa princesitaaaaaaaaa.
El reino fue
hipotecado… por aquel entonces casi rozando los cuarenta…el caballo se había
esfumado y el príncipe había sido destronado pero sabía que tarde o temprano
sin corona aparecería… creía en el amor y mientras llegaba el suyo, machos y no
tan machos… de distintas estirpes la han cortejado: inseguros que se asustan al saberte independiente, chistosos a los que no les hace ninguna
gracia que tu lo seas, los que se acercan haciéndote creer que sólo quieren amistad y cuando menos te
los esperas zas!! ya te han comprado una correa de diseño, los insistentes que insisten e insistennnn desesperadamente y de
repente pluf!!su interés se esfuma como el gas de un botella de champán, otros que presumen de ser donjuanes y se quedan a mitad de camino
en el juego de la pasión, los que roncan
sin compasión, los que te invitan a
cenar y tu pagas la cuenta, los que
pasan tanto tiempo en el gimnasio que se han olvidado de hablar, los que no
han sabido hacerlo nunca, los que tardan
más en salir de la ducha que tú, a los que les duele la cabeza, los que
prometen al inicio y la cagan al final, los que la cagan desde el
principio, los que siempre aparecen en tú casa a la hora de comer, los casados que sólo quieren jugar a
seducirte y cuando descubres su estado civil o lo niegan o lloriquean y se
lamentan de estar viviendo con Cruella de Vil, los engreídos que desean conquistarte y cuando lo consiguen no se
atreven a cumplir, los divorciados
de pacotilla que siguen enganchados a sus ex, los sicóticos a los que les pides fuego y creen que les quieres
desposar, los que morirían por tu amor
y se lían con el panadero…..
Hace mucho que
deje de creer en cuentos, pero a todos vosotros!! Hombres!!, que os habéis
cruzado en mi vida o en la de mis amigas, deseo daros las gracias por
existirrrr sin vosotros nunca habría descubierto lo que no quiero y lo que
valoro en un hombre….a ti, mi príncipe azul te quiero donde quiera que
estéssss….
Wendy…….que no me
cuenten cuentos…
1 comentario:
La madre de Deu!!! Como me ha gustado tu post!! Q identificada me he sentido!! Y la ostia!! Q yo también estoy esperando a ese príncipe que quizás ya esté desteñido.
Mi padre me dijo que tendría que besar muchos sapos antes de encontrar al príncipe, pero joder!! que ya son muchos y estoy cansada!!!
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